Fallos de seguridad en las instalaciones de la comisaría:

El acceso a la comisaría y a la zona de aparcamiento: No existe un medio eficaz que impida el acceso como un pilón metálico elevable. En su lugar hay una simple barrera levadiza (tipo peaje) que lleva años sin funcionar, con lo que no se puede impedir la entrada de vehículos no autorizados. La entrada a la comisaría no dispone de cristales blindados que garanticen la seguridad del acceso, prácticamente es de acceso libre cuando lo que necesitamos es una zona confinada que impida la entrada de personal no autorizado.
Por motivos de seguridad el vestibulo de entrada del edificio policial debe estar sectorizado con controles biométricos. Las ventanas están a pie de calle, son viejas y de madera sin ningún tipo de protección que impidan el acceso violento al interior de la comisaría.
En el turno de noche falta personal para cubrir la vigilancia de las instalaciones, quedando la mayoría de los días un solo agente para la vigilancia y custodia de las instalaciones.

Necesitamos edificaciones nuevas y adecuadas a las funciones policiales para las comisarías para la Guardia Urbana de Barcelona.

Pedro Ribas Presidente del Comité de Seguridad